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Aunque el camino que ha de recorrer la industria de la construcción hacia la transformación digital sea complejo, Konica Minolta le abrirá todo un abanico de posibilidades. Además de reducir sus tiempos de entrega y costes, podrán mejorar su comunicación en el servicio, implementando así tecnologías sobre seguridad, un nuevo control de calidad innovando en nuevos productos y proyectos. Todo ello, posicionará como líderes del mercado a las empresas que sean capaces de adaptarse al cambio, enfrentándose a los riesgos de costes, preocupaciones en la seguridad de los datos y la mejora de los servicios que sean capaces de ofrecer a sus clientes con estas nuevas herramientas, sabiendo medir así su éxito de inversión.

Para lograr el éxito en el proceso de transformación digital del sector industrial, es fundamental establecer unos métodos de adaptación a este cambio, siendo primordial establecer una estrategia clara con objetivos específicos. Además, es necesario llevar a cabo un análisis, que dictamine la situación actual de dicha empresa, para conocer la infraestructura tecnológica con la que partimos, es decir, los procesos internos, recursos financieros y competencias del equipo que la componen. Llegados a este punto, habría que evaluar la capacidad de saber seleccionar las tecnologías que mejor se adapten a las necesidades de cada empresa, puesto que, cada una contará con determinadas características y tendrá que conocer su compatibilidad con la infraestructura inicial. Una vez hecho ese análisis previo, incluirá desde un software de gestión de proyectos, hasta soluciones de BIM, realidad aumentada, e inteligencia artificial.

Asimismo, la capacitación y preparación al personal por parte de la empresa, será un punto clave para la adopción de estas nuevas tecnologías por parte del equipo profesional, puesto que, fomentar la cultura del cambio entre ellos, dará pie a un salto cultural y digital. Por otra parte, tendrán que saber establecer métricas para monitorizar este progreso, y así poder realizar los ajustes convenientes cuando sea necesario.

Por otro lado, el compromiso de adaptación y la evolución constante no lo es todo para sumarse al cambio, también será necesaria una adopción de mentalidad de innovación que persiga la búsqueda constante de nuevas soluciones tecnológicas para diferenciarse en el mercado.

Una vez hayan sido conocidos e implantados todos estos métodos de adaptación, se podrán observar grandes beneficios, como una mayor eficiencia y productividad por parte de los empleados, la colaboración entre departamentos, el cumplimiento normativo y la trazabilidad de los documentos, una reducción de error que derivará en un ahorro de costes, y por supuesto la precisión y fiabilidad de la documentación sobre proyectos futuros.

En definitiva, las compañías constructoras pasarán de manejar una gran cantidad de información de manera manual, a utilizar un sistema de gestión de información, que les ayudará a acelerar la gestión de sus proyectos de una forma más rápida y ágil, impulsándolos así al liderazgo del mercado industrial.