Noticia ampliada
30-06-2022
Iberdrola ha puesto en marcha en Irlanda su primer sistema de baterías a escala comercial en el mundo. Esta instalación de 50 megavatios (MW) de potencia y 25MWh de capacidad de energía, denominada Gorman, constituye además el primer proyecto renovable construido por la compañía en este país en más de 25 años.
Ubicado en el Condado de Meath, al este de Irlanda, el sistema está compuesto por más de 4.000 módulos repartidos en 16 contenedores, que ocupan una extensión similar a la de un campo de fútbol. El proyecto, el primero de este tipo operativo en Irlanda, ha requerido una inversión de 28 millones de euros.
Su puesta en marcha supone la culminación de la principal iniciativa del programa DS3 desarrollado por los dos operadores de la red de transporte de Irlanda – EirGrid y SONI - para reforzar la red ante el incremento de la generación renovable. En concreto, la batería de Gorman dará servicio durante seis años a EirGrid, contribuyendo así a la seguridad y sostenibilidad de la red eléctrica irlandesa y a la consecución del objetivo fijado por Gobierno de Irlanda de alcanzar para el año 2050 la neutralidad de emisiones.
La compañía tiene previsto ampliar en el futuro este sistema de almacenamiento para duplicar su capacidad, hasta los 100 MW.
Los sistemas de almacenamiento son clave para abordar el reto de la transición energética y están llamados a convertirse en un elemento esencial en el sistema eléctrico, porque permiten mejorar la calidad del suministro eléctrico, asegurar la estabilidad y fiabilidad de la red equilibrando la oferta y la demanda y garantizar la disponibilidad de energía verde adicional cuando se necesita.
• Apuesta por el almacenamiento
El almacenamiento energético es una de las apuestas estratégicas del grupo Iberdrola para los próximos años. La compañía tiene ya asegurada una potencia global de 193 MW de baterías. Esta tecnología se incrementará notablemente en el futuro, con una cartera de 1.100 MW. De ellos, 900 MW corresponden a iniciativas en Reino Unido; 100 MW a proyectos en España y Portugal y otros 100 MW a instalaciones en Australia.
La compañía mantiene también su apuesta por el almacenamiento a través del bombeo eléctrico, donde la Iberdrola es líder con una potencia instalada cercana a los 4.500 MW, en proyectos como Cortes-La Muela (Valencia) -la mayor instalación de estas características en Europa- y el complejo Tâmega, en construcción en Portugal.
Esta gigabatería representa una inversión superior a los 1.500 millones, e incluye la construcción de tres presas y tres centrales (Gouvães – que ya se ha puesto en marcha -, Daivões y Alto Tâmega) con una capacidad conjunta de 1.158 MW. Esta gran infraestructura renovable tendrá capacidad de almacenamiento suficiente para dar servicio a dos millones de hogares portugueses durante un día entero. El complejo aportará 880 MW de capacidad de bombeo al sistema eléctrico portugués, lo que implicará un incremento superior al 30% respecto a los megavatios de bombeo disponibles en la actualidad.
• Irlanda, plataforma de crecimiento renovable
Irlanda constituye una de las principales plataformas de crecimiento en renovables para el grupo Iberdrola. La compañía cuenta en este país con planes para desarrollar 3.000 MW de proyectos de eólica marina, junto con DP Energy.
Se trata de los parques eólicos marinos flotantes de Inis Ealga, en la costa sur de Co. Cork, y Clarous, en la costa oeste de Co.Clare, y el parque marino de cimentación fija Shelmalere, frente a la costa este de Irlanda. Cada uno de estos proyectos contará con una potencia instalada de 1.000 MW, suficiente para suministrar conjuntamente energía limpia a más de 2,8 millones de hogares.
El grupo Iberdrola tiene previsto invertir en Irlanda hasta 100 millones de euros en nuevos proyectos renovables terrestres y de almacenamiento hasta 2025. Entre las iniciativas que Iberdrola está desarrollando en este país destacan la repotenciación e hibridación con baterías de los parques eólicos Barnesmore, en el Condado de Donegal (Irlanda), Rigged Hill, Corkey, Elliots Hill y Callagheen en Irlanda del Norte.
La estrategia de crecimiento sostenible de la compañía basada en promover la electrificación de la economía a través de la inversión en energías renovables, redes eléctricas y almacenamiento energético le ha permitido convertirse en un líder energético global y en la primera de su sector en Europa por capitalización, con unos 70.000 millones de euros de valor en Bolsa.