• Con una superficie de casi 20 hectáreas, la planta de Conde producirá más de 20 GWh/año de energía fotovoltaica.
• La energía producida equivale al suministro medio de 5.000 hogares al año y evitará la emisión de unas 6.000 toneladas de CO2 al año.
16/03/2022
Iberdrola ha iniciado hoy las obras de la planta fotovoltaica Conde (13,51 MW), situada en Palmela, con una superficie total de casi 20 hectáreas. Se trata de una de las cuatro plantas fotovoltaicas que Iberdrola desarrolla en el distrito de Setúbal, adjudicadas en la subasta fotovoltaica de 2019, e incluidas en el plan de aceleración de inversiones asumido por la compañía, con el objetivo de terminar las obras este año.
Una vez operativa la planta producirá 20 GWh/año, el equivalente al suministro medio de 5.000 hogares y evitará la emisión de unas 6.000 toneladas de CO2 al año.
En total, las cuatro plantas tendrán una capacidad de 86 MW: Algeruz II (27,35 MW), Conde (13,51 MW), Alcochete I (32,89 MW) y Alcochete II (12,72 MW). Una vez estén todas en funcionamiento, evitarán la emisión de 56.000 toneladas de CO2 al año.
Para Iberdrola, el inicio de las obras "certifica el compromiso de Iberdrola con el desarrollo de las energías renovables en Portugal. Iberdrola está a la vanguardia mundial de la transición energética, esencial para la sostenibilidad del planeta, pero también para reducir la dependencia energética de los mercados inestables. La apuesta por las renovables garantiza el futuro medioambiental y la seguridad económica de familias y empresas."
La primera piedra de la planta fotovoltaica de Conde fue colocada por Renata Rodrigues, en nombre de Iberdrola Renewables Portugal, y por Álvaro Manuel Balseiro Amaro, alcalde de Palmela, como muestra del compromiso conjunto con el desarrollo de las energías renovables.
En Portugal, Iberdrola da servicio a una cartera comercial de más de 870.000 puntos de suministro, cuenta con 92 MW eólicos en operación y está poniendo en marcha la gigabatería del Támega, uno de los grandes proyectos de bombeo de Europa, de 1.158 MW. Este complejo comprende tres embalses (Gouvães, Daivões y Alto Támega) y tres centrales hidroeléctricas, que irán entrando en funcionamiento progresivamente hasta 2024. De hecho, la compañía acaba de conectar a la red el primer grupo del aprovechamiento hidroeléctrico del Támega, una turbina de bombeo de 220 MW de capacidad.
El complejo será capaz de producir 1.766 GWh al año, suficiente para satisfacer las necesidades energéticas de los municipios vecinos y de las ciudades de Braga y Guimarães (440.000 hogares). Además, esta gran infraestructura renovable tendrá capacidad de almacenamiento suficiente para dar servicio a dos millones de hogares portugueses durante un día entero y contribuirá a los objetivos de descarbonización e independencia energética fijados por el Gobierno de Portugal.
• Más compromiso con las renovables, las redes y el almacenamiento
En 2021, la empresa ha destinado más de 4.300 millones de euros a inversiones en energías renovables. Esta mayor inversión ha permitido al grupo instalar 3.500 nuevos megavatios (MW) renovables en los últimos 12 meses y alcanzar los 38.000 MW de capacidad renovable en todo el mundo. La capacidad de construcción supera los 7.800 MW, de los cuales 2.600 MW son de energía eólica marina.
La Península Ibérica se posiciona como la zona en la más capacidad renovable se ha implementado, alcanzando los 1.800 MW de nueva instalación, una cifra que supone el 56% de toda la capacidad instalada en 2021. Así, se han alcanzado los 19.210 MW verdes.
Este gran crecimiento se ha visto impulsado de gran manera por el proyecto del complejo Tâmega, donde la compañía ha puesto en marcha el primer grupo de la central hidroeléctrica de Gouvães. Del mismo modo, destaca la puesta en marcha de 986 MW fotovoltaicos, con proyectos como la planta fotovoltaica Francisco Pizarro (516 MW) y Arenales (150 MW).
Hace 20 años, la empresa asumió un importante papel social vinculado a los objetivos de lucha contra el cambio climático a través de las energías renovables. Hasta ahora, ha invertido 120.000 millones de euros para, entre otros objetivos, generar elementos de producción de energía renovable, promover el desarrollo de redes inteligentes y generar oportunidades, transformando sectores como el de los astilleros.