Dentro del marco de las actividades paralelas a la Cumbre del Clima de Naciones Unidas (COP25), el Centro de Innovación de 3M en Madrid acogió ayer el encuentro “Business for the Greater Good”, en colaboración con la Red Española del Pacto Mundial.
Dicho evento contó, en un primer bloque institucional, con la participación de Reyes Maroto, Ministra E.F. de Industria, Comercio y Turismo; Ángel Pes, Presidente de la Red Española del Pacto Mundial de las Naciones Unidas; y Gayle Schueller, Vicepresidenta y Directora Mundial de Sostenibilidad de 3M; a continuación, en el bloque científico, intervino José Manuel Moreno, Catedrático de Ecología de la Universidad de Castilla-La Mancha y miembro del Grupo Intergubernamental de Expertos sobre Cambio Climático (IPCC); y, finalmente, dentro del bloque empresarial, Ana Gascón, Directora de Responsabilidad Corporativa de Coca Cola Iberia; y Valentín Alfaya, Director Corporativo de Seguridad y Salud, Calidad y Medio Ambiente de Ferrovial participaron en un debate moderado por Elvira Carles, Directora de la Fundación Empresa y Clima.
Cuando ya nadie duda sobre el impacto humano sobre el cambio climático y sus previsibles consecuencias para el crecimiento sostenible de las generaciones futuras, la implicación de la ciencia se hace más necesaria que nunca para mitigar sus efectos y la participación de las empresas y la comunidad científica resulta indispensable para afrontar nuestro destino común.
En palabras de la Ministra Reyes Maroto, “La transición ecológica debe ser un objetivo de Estado, pero la responsabilidad para afrontar este reto no puede ser sólo de los gobiernos, sino una tarea compartida donde también las empresas que tengan la capacidad de impactar sobre diferentes mercados e industrias clave a nivel global deben desempeñar un rol fundamental. Este es el caso de 3M que, a través de la ciencia y la innovación, ha asumido el reto de aportar soluciones prácticas en ámbitos tan diversos como la contaminación, la accesibilidad al agua potable, la eficiencia de las instalaciones de energía renovable, la seguridad alimentaria, el procesado de residuos, la mejora de la calidad del aire, la salud y la protección de las personas. Y siempre con innovaciones inspiradas en mejorar la vida de las personas de forma sostenible”.
Con presencia en más de 200 países y unos 90.000 empleados en todo el mundo, 3M considera que “La Ciencia es solo Ciencia, hasta que se aplica para cambiar el mundo” y de forma proactiva, lleva décadas enfrentando el problema de la crisis climática global con políticas y soluciones concretas, incluyendo el desarrollo de nuevos productos bajo la premisa de “hacer que las cosas ocurran”.
“Consideramos que la Sostenibilidad es un problema global que solo puede ser abordado con la colaboración de gobiernos, industrias, empresas y consumidores. Nos enfrentamos a complejos desafíos que debemos afrontar de forma inmediata y responsable. Es tiempo de actuar y solo trabajando juntos podremos conseguirlo”, comentó durante su presentación Gayle Schueller. “Una muestra de nuestro compromiso es que, desde ahora, cada nuevo producto que lance 3M al mercado tendrá que demostrar primero que cuenta con un Valor de Compromiso de Sostenibilidad, demostrando previa y claramente cuál será su impacto. Y teniendo en cuenta que 3M lanza aproximadamente 1.000 nuevos productos cada año en todo tipo de sectores industriales, se trata de una medida muy relevante a nivel global”, añadió.
Con una trayectoria de más de un siglo y pioneras políticas de protección del medio ambiente, la compañía anunció en 2018 un nuevo Marco Estratégico de Sostenibilidad para dirigir sus esfuerzos hacia tres áreas prioritarias en las que pudiera contribuir con un mayor impacto, aprovechando sus capacidades globales y plataformas tecnológicas: diseñar soluciones que consigan mejores resultados con menos materiales, avanzando hacia una economía circular; Innovar para descarbonizar la industria, acelerando soluciones climáticas globales y mejorando la huella ambiental; y finalmente crear un mundo más positivo a través de la ciencia, inspirando a la gente para colaborar en ese objetivo.
Por su parte, Angel Pes también destacó la importancia del compromiso del sector privado para cumplir los objetivos del programa de la Agenda del Desarrollo Sostenible para 2030: “Se trata de una Agenda muy ambiciosa y exigente, pero realizable. Contamos con las tecnologías, los recursos financieros y el capital humano para llevarlos a cabo; ahora solo es necesario un último factor: la voluntad de actuar”, afirmó durante su intervención.
• Ciencia e innovación al auxilio del Planeta
Imagine por un momento que un nuevo material, aplicado sobre nuestros tejados, convirtiese cada teja en una superficie para reducir la contaminación del aire, utilizando el sol y la lluvia. O ahorrar energía gracias a unas partículas capaces de aligerar el peso de los aviones y de los automóviles en los que viajamos. O que unas láminas invisibles consiguieran que nuestras ventanas bloqueen hasta un 97% de los rayos infrarrojos del sol manteniendo los interiores frescos y confortables y reduciendo el consumo de energía de los sistemas de enfriamiento…
Son algunos ejemplos reales de cómo la comunidad científica puede convertirse en el mejor aliado de un Planeta que se enfrenta a desafíos sin precedentes de manera cada vez más acelerada y del relevante papel de la ciencia y la investigación a la hora de lanzar programas, estrategias y soluciones concretas.
El cambio climático es el mayor desafío al que nos enfrentamos actualmente como Comunidad global. Recientes estudios llevados a cabo por investigadores de la Universidad de Washington apuntan a que el calentamiento global provocará que la temperatura media de la Tierra sea entre 3 y 5 ºC más alta en 2100. Según expuso José Manuel Moreno, “Su impacto es generalizado y sus riesgos no están limitados por continente, industria o incluso especies. Los desastres climáticos extremos son cada vez más frecuentes y generan un importante impacto económico. Los ecosistemas se enfrentan al colapso y la biodiversidad se ve amenazada ya que actualmente casi un millón de especies se enfrentan a la extinción.
A nivel mundial, el 73 % de la basura en las playas es plástico: botellas, tapones, envases de alimentos, bolsas de supermercado y recipientes de poliestireno; y para 2050, prácticamente todas las especies de aves marinas del planeta estarán comiendo plástico.
En ese contexto, 3M refuerza su compromiso con el pacto global establecido en los Acuerdos de París de 2015 y ya está incorporando en sus objetivos, operaciones y acciones los resultados del Informe Especial sobre Calentamiento Global de 1.5°C realizado por el Panel Intergubernamental sobre Cambio Climático en 2018. Y lo hace con medidas concretas.
Un primer paso en ese compromiso es que, desde este año, la sede mundial de 3M funciona exclusivamente con energías renovables y el objetivo es que todas sus operaciones globales funcionen al 100% con energía procedente de fuentes renovables, innovando para un futuro libre de carbono. Pero además, ha puesto sus 45 plataformas tecnológicas a trabajar para conseguir que la ciencia y la innovación tengan como resultado nuevos productos que ayuden a mitigar y controlar el impacto humano en el clima del Planeta, creando un futuro sostenible para las nuevas generaciones.